Con la llegada del verano, llegan los temidos incendios forestales que buscan arrasar con todo alrededor. ¿Cómo poner a salvo los terrenos? Te diremos qué hacer.
Hay dos elementos de la naturaleza que tienen un enorme poder destructivo cuando se desatan y es poco lo que puede hacer el hombre para controlarlos. Dichos elementos son el agua y el fuego. El verano y las altas temperaturas no sólo son las condiciones perfectas para disfrutar de las playas, sino que también representa un problema grave: comienza la temporada de incendios forestales.
¿Somos los propietarios de terrenos o estamos en búsqueda del sitio de nuestros sueños? Entonces sabemos que el fuego puede ser un gran problema, ya que puede acabar con las siembras, estructuras, posesiones y mucho más. Sin duda, sobran los motivos para mantener las llamas bien alejadas de nuestra propiedad.
Si tomamos como referencia los pasados 30 años, el 97.4% de la ocurrencia de incendios forestales se concentraron entre las regiones de Valparaíso y Los Lagos.
De acuerdo con un reciente informe de la Corporación Nacional Forestal (Conaf), efectuado entre el 1 de enero al 10 de febrero de 2017, se dejó en evidencia que los incendios forestales que provocan mayor afectación se concentraron en la zona central del país, lugar donde están los pisos vegetacionales más amenazados. Mientras tanto, las zonas más norteñas y australes son las que presentan menor riesgo debido a los bajos niveles de densidad de población y las vías de comunicación con poco desarrollo.
Un reporte de la Conaf, que recopila las causas de incendios entre los años 2003 y 2016, detalla las cuatro razones más comunes por las cuales ocurren los incendios en Chile.
El factor principal es el uso de fuego por transeúntes, representando el 29,45% de las incidencias, seguidos por los actos de vandalismo (6,09%) y niños jugando con fuego (5,29%). Es significativo que en el primer caso (fuego provocado) muchos eventos están asociados a medidas que toman las personas, entre ellos los dueños de terrenos, para ahuyentar a los ratones, eliminar los matorrales o usar el fuego como plaguicida.
Para evitar los incendios en los terrenos es importante desmalezar los bordes de los sitios, podar los árboles y crear un anillo a prueba de fuego de unos 30 metros alrededor de las construcciones del lugar. Otra medida efectiva, es la creación de una franja de 10 metros alrededor de la construcción libre de muebles, juguetes, maleza y neumáticos.
De igual forma, es necesario canalizar los cables eléctricos porque este es un factor que puede provocar incendios.
Si los hay. Entre algunas características de estos seguros se cubren los daños materiales por la acción del incendio o que sean consecuencia de este. Se puede contratar de manera colectiva o individual y es posible incorporar cláusulas adicionales como roturas de cañerías, cauces de ríos, entre otras.
Hay sistemas de detección terrestre móvil (desplazamiento de vigilantes en un área particular), la detección terrestre fija desde una estructura metálica o de madera (la de mayor aplicación en Chile) y la detección aérea, usando aviones monomotores de ala alta.
Para tener a salvo nuestro terreno de los venideros incendios forestales, una cultura de prevención evitará males mayores y la pérdida de activos importantes
