La compra de terrenos campestres en México es una inversión inteligente, que, por un lado, requiere menor capital que otro tipo de inversiones en el sector inmobiliario y, por otro, puede ofrecer grandes rendimientos. ¡Aquí descubrirás todo lo que necesitas saber antes de invertir!

Consideraciones antes de la compra

Luego de establecer un capital y un propósito de inversión, es necesario analizar las características de la propiedad para determinar si responde al objetivo con que se planea adquirirla. Ten presente que no es lo mismo comprar un terreno para vivir en el campo, que para sembrar o construir locales comerciales. Por eso, es importante considerar los siguientes puntos:

• Resolución de urbanismo o uso de suelo. Es el documento que especifica si el terreno está autorizado para construir y qué tipo de obras están permitidas. Antes de decidir sobre la compra es indispensable solicitar este documento al vendedor y, en caso de ser tu primera experiencia, conviene pedir asesoría especializada para verificar que el terreno cumpla con las condiciones que estás buscando.
• Estatus de la propiedad. En México, todos los terrenos en venta deben contar con un expediente en el Registro Público de la Propiedad y el Comercio, que permite conocer el estatus de regularización de la propiedad. Al consultar este documento, también te aseguras de que las escrituras sean válidas y que el terreno esté a nombre del vendedor.
• Historial. El listado de propietarios de los terrenos es otra información relevante que se puede revisar en el Registro Público de la Propiedad. Para ello, basta con verificar el sello o folio de este organismo en las escrituras de los terrenos.
• Entorno natural. Analiza si la zona en que planeas invertir es susceptible a fenómenos naturales como terremotos, deslaves, huracanes o lluvias torrenciales. Esto te ayudará a definir no solo si el precio de la propiedad es adecuado, sino a estimar un presupuesto de obra en función de las condiciones geográficas del terreno y el clima de la región.
• Infraestructura y servicios. Incluso cuando hablamos de terrenos campestres, un factor que incrementa la plusvalía de las propiedades es la cercanía con proyectos de desarrollo urbano y el abasto de servicios esenciales como luz, agua, línea telefónica y drenaje.

Proceso de compraventa

Una vez que has analizado suficientes opciones de terrenos en venta y encontrado uno que se adapta a tus necesidades, lo ideal es que el proceso se lleve a cabo respetando los siguientes pasos:

1. Acuerdo sobre el precio de la propiedad. En esta primera etapa, el propietario debe presentar por escrito una propuesta de compraventa en la que se establezca el costo total de la propiedad, además de los plazos y montos a pagar. Una vez que ambas partes están de acuerdo, la transacción se formaliza mediante la firma de un contrato.
2. Entrega del apartado. Para asegurar la compra, el interesado deberá entregar al vendedor un apartado con una equivalencia del valor de la operación de compraventa. En este momento, el vendedor entrega al comprador los documentos necesarios para tramitar el nuevo título de propiedad.
3. Visita al notario. El notario público es el especialista que se encarga de validar la operación de compraventa, tanto en sus aspectos legales como fiscales. Además, se encarga de la emisión del título correspondiente de la propiedad y su validación ante el Registro Público de la Propiedad. El costo por los servicios del notario, así como el pago de los impuestos, dependerá del avalúo de la propiedad que previamente haya hecho la notaría.

Ventajas de vivir en el campo

• Un estilo de vida con salud integral. Para muchos, el ajetreo, la prisa y la falta de privacidad con que se vive en las grandes ciudades está siendo difícil de sobrellevar, especialmente en tiempos en que la distancia social está relacionada con el cuidado de la salud. En este contexto, la desaceleración del ritmo de vida y el disponer de espacio suficiente para construir en función de las propias necesidades se proponen como grandes ventajas de vivir en el campo.
• Aumento del patrimonio. La inversión en bienes inmuebles es una de las más seguras, pero si hablamos de tierras de campo, las perspectivas de rendimiento pueden ser aún mejores. Esto se debe a que invertir en terrenos campestres resulta más económico que hacerlo en la ciudad y al paso del tiempo, con el incremento de desarrollo urbano en zonas aledañas, el valor de estas propiedades también se potencia, especialmente si eliges un terreno cercano a una zona turística.
• Ingresos adicionales. Algunas personas que adquieren terrenos de campo para construir casas de descanso o vacaciones deciden rentar estas propiedades durante las temporadas en que no hacen uso de ellas. De esta manera obtienen un ingreso adicional, en tanto que otros encuentran la forma de maximizar su inversión empleando la tierra para desarrollar actividades agropecuarias o ganaderas.

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Foto principal: Pexels.